Un paso hacia atrás en mi huida de Google, pero solo uno.

Llevo casi cuatro años con mi móvil actual. Poco después de comprarlo eliminé la versión de Android que venía de serie para utilizar una ROM de Cyanogen. Con el cambio gané en rendimiento y privacidad pero perdí la posibilidad de utilizar el ecosistema de aplicaciones de Google en el teléfono.

Durante todo este tiempo he pasado sin esos servicios y ni ha sido difícil ni he tenido la sensación de perderme nada. Pero últimamente he necesitado algunas aplicaciones que, por su naturaleza, no tenían remplazo en F-Droid, la fuente de aplicaciones libres que me ha estado proporcionando todas las que necesitaba.

Por eso instalé una versión reducida de los servicios de Google. Lo mínimo imprescindible para poder utilizar Google Play. Al reiniciar para que se hicieran efectivos los cambios, Google empezó a interferir en el funcionamiento de mi teléfono haciendo algunas cosas inesperadas. Entre otras, volver a asociar la cuenta de Gmail con los contactos y el calendario. Me llevó un rato deshacer todo el lío para volver a dejarlo tal como estaba, configurado con mi servidor personal.

Una de las primeras aplicaciones que he instalado es Google Music. No tenía pensado hacerlo, pero recordé que en su momento compré algunos discos y me apetecía volver a escucharlos. Después de estar unos días utilizándola he decidido mantenerla porque es una aplicación que me aporta mucho. Ahora, además de podcasts escucho música de camino al trabajo o a casa.

Mi experiencia sin Google no ha sido negativa, de hecho me ha servido para aprender que no es necesario dejar todo en sus manos. Eso hace que me plantee una actitud menos radical hacia los servicios de Google. Es cierto que son intrusivos pero algunos son muy interesantes. Además, por temas de trabajo tengo que lidiar habitualmente con Google Drive o Google Classroom, por lo que tampoco puedo mantener una actitud talibanesca.

Todo o nada no parece la mejor elección, más vale ser un poco más intencional y aprovechar lo mejor de cada producto, sin dejar a un lado la privacidad y mis derechos como usuario.

A lo mejor habéis pasado por algo parecido. Si queréis ya sabéis que estoy en twitter y me podéis contar algo.

Un saludo.