Menos bolsas de plástico. Un buen paso de Lupa

Hace tiempo que no salgo de casa a hacer la compra si no es con una de mis bolsas reutilizables. Es un paso para reducir el consumo de plástico pero no es suficiente. Uno de los problemas que todavía me quedaban por resolver era el de la fruta y verdura a granel, que hay que embolsar para pesar. En algunos productos se puede prescindir de la bolsa y pegar la etiqueta directamente, pero son los menos, por lo que al final llegas a casa con media docena de bolsas pequeñas y endebles que han servido para llevar un poco de fruta y ya no dan para nada más o bien están agujereadas, como cuando compras peras u otras frutas de tallo duro.

Claro está que existen soluciones. Hay gente que utiliza bolsas de algodón, compradas o recicladas a partir de camisetas viejas. Esa parece una buena opción pero no me atrevía a dar el paso. No quería poner a la gente del Lupa en el que suelo comprar en el aprieto de decirme que no las podía usar. Por eso, me llevé una sorpresa el otro día cuando junto a la báscula descubrí un montón de bolsas reutilizables, para usar con la fruta y verdura. Las bolsas son de de malla de plastiquete, eso sí, pero tienen pinta de poder reutilizarse un buen montón de veces.

He comprado un paquete de cuatro y la primera impresión tras usarlas es que aguantan bastante peso y dejan ver bien el contenido, aunque la etiqueta a veces se despega con demasiada facilidad y puede perderse por el camino. Con estas bolsas y el guante para la fruta que siempre llevo en la bolsa he mejorado mi plasticosidad en la compra. Es una iniciativa interesante y espero que sigan por ese camino.

Si has sido más valiente que yo y has intentado usar las bolsas de algodón puedes contarme el resultado y en qué supermercados has tenido éxito.

Un saludo.