Guía para Comprar una vivienda
Para empezar
Lo más importante es tener claro un conjunto de características que son imprescindibles a la hora de elegir nuestra vivienda. Nosotros hicimos una lista con irrenunciables y otra con preferibles. Esto es importante a la hora de empezar a buscar la vivienda, ya que la oferta puede ser demasiado amplia como para ir analizando vivienda por vivienda.
Conócete a ti mismo
El dinero suele ser el factor limitante. Ten en cuenta que, por lo general, los bancos te van a pedir que dispongas de un capital líquido que se aproxime al 33% del precio de venta. En ese porcentaje va incluido, por lo general, el 20% del precio de la vivienda, lo que sería la entrada, más un 13% que incluye los gastos de la compra, incluyendo impuestos, notaria, gestoría…
Eso tiene que servir para establecer tu límite, es decir, no merece la pena ver viviendas para las que no tienes presupuesto. Te hace perder tiempo y te deja con un regusto de no comprar lo que te gustaría, sino lo que puedes. Y, aunque no sea evidente, es mejor comprar desahogado lo que te puedes permitir que comprar con agobios lo que realmente te gusta.
Portales inmobiliarios
La mayoría de las propiedades que se venden se anuncian en los portales inmobiliarios. De hecho, en muchos casos es más fácil conocer la oferta de una inmobiliaria a través de uno de esos portales que en su propia página web.
Considera darte de alta en estos cuatro:
Todos tienen sistemas de alerta sobre las búsquedas realizadas, unos mejores que otros, y con un poco de suerte tendrás controlado un amplio porcentaje de la oferta que te puede interesar.
A mí me gustó especialmente la opción de descartar anuncios de Idealista y Habitaclia, porque si no descartas, acabas viendo los anuncios premium y destacados un día sí y otro también, aunque no te interesen.
¿Comprar a un particular o a inmobiliaria?
No hay una opción que sea de por sí mejor y, a veces, ni siquiera existe la opción, ya que si la vivienda que te puedes permitir sale solo por uno de esos canales no podrás elegir. Con los particulares el trato es más directo y podrás negociar mejor el precio. Con un agente inmobiliario el proceso puede ir más fluido, aunque dependiendo de la inmobiliaria, podría tener costes asociados.
Tasación
Es un trámite de valoración de la vivienda que vas a comprar y es imprescindible en el caso de que, como la mayoría de la gente, necesites pedir una hipoteca al banco para llevar a cabo la compra.
Normalmente los bancos solo conceden el 80% del valor de tasación como hipoteca. Los bancos pueden encargar la tasación a agencias de su confianza pero deberían aceptar cualquier tasación hecha por una empresa homologada por el Banco de España.
Es interesante hacer la tasación por tu cuenta y, si el resultado es conveniente, pasarla luego al banco. Así nos evitamos sorpresas, pero para ir más sobre seguro sería interesante contratar la tasación con alguna de las empresas tasadoras que normalmente trabajan para el banco al que le vas a pedir la hipoteca.
Hipoteca
Fija, mixta o variable. Elige en función de tu capacidad económica o tu bienestar emocional. A veces, ahorrar un poco puede salir mal a largo plazo, pero cada uno tiene que valorar las opciones.
Normalmente las hipotecas salen más baratas si se contratan vinculaciones con el banco, como domiciliar la nómina, contratar sus seguros de vida u hogar, o similares. Estate atento, porque lo que te puedes ahorrar en la hipoteca lo puedes estar pagando por comisiones bancarias en esos productos vinculados. Hacer números es siempre el mejor consejo.
Firma
Una vez aprobada la hipoteca y si la tasación es favorable te tocará dar los pasos hacia la firma. El banco te suministrará una serie de documentos precontractuales que tendrás que aceptar y se te asignará una gestoría. La gestoría se encargará de muchos trámites pero la elección de notario es cosa tuya.
Asegúrate de elegir una fecha de firma que permita preparar todos los trámites económicos. Por ejemplo, emitir los cheques para los vendedores o preparar las transferencias a sus cuentas, una vez comprobadas.
Después de la firma
Una vez firmada la hipoteca te darán en la notaría una copia simple de la escritura. Con ella puedes hacer las gestiones necesarias para el cambio de titularidad de los suministros o el empadronamiento, hasta que te faciliten el original de las escrituras cuando hayan finalizado todos los trámites de registro de la propiedad, liquidación de impuestos y todas las gestiones que realiza la gestoría por ti.
Para finalizar
Comprar una vivienda, sobre todo si va a ser tu vivienda habitual, es una decisión muy importante, que te encadenará a una deuda durante un montón de tiempo. Por eso es mejor no precipitarse y conocer en qué momento de tu vida te encuentras. Yo no creo que exista la vivienda ideal que valga para toda la vida, así que tampoco te preocupes mucho por conseguir esa casa de tus sueños. Es preferible optar por una vivienda que pueda servir para vivir el resto de tu vida en ella, pero que puedas vender para comprar otra si tu situación vital cambia.
Un saludo.